Una lista de control para ti
Así que decidiste tener un hijo. Te felicitamos y esperamos que lo consigues cuanto antes. ¿Pero sabes lo qué tienes que hacer ahora? Aquí tienes una pequeña lista que debes chequear.
¡Prepara tu organismo!
¡Adopta un estilo de vida saludable! Dejar de fumar. Si no lo consigues, hay que reducir el tabaquismo lo más posible. No consumir alcohol en exceso.
Informa tu médico
Ve a tu ginecólogo e infórmalo que quieres quedarte embarazada. No es suficiente hacerle una visita, él no tiene cómo saber tus intenciones. Pídele una consulta ginecológica. Tu médico te va a pedir hacer una serie de pruebas para ver si tu organismo está preparado para un embarazo. Las pruebas más habituales que se piden están enumeradas al final de este capítulo. Antes de que se acabe la visita al médico, pregúntalo si eres una de las personas con riesgo de trombofilia.
Toma vitaminas
Para ayudar tu organismo y el buen desarrollo del feto, incluye en tu dieta diaria NatalVit, un complejo de vitaminas, minerales y oligoelementos en concentraciones óptimas tanto para la madre, como para el feto.
¡Haz el amor!
Habla con tu pareja sobre el deseo de tener un hijo y mantén con él relaciones sexuales con regularidad y sin protección.
¡Toma ProFecund!
Aunque no tengas problemas de fertilidad, toma ProFecund para el ácido fólico de su composición y para más apetito sexual que te ofrece.
¡Mantén tu optimismo!
¡Mantén tu ánimo positivo hasta obtener el resultado deseado!
¿Qué pruebas tendrás que hacer?
La lista de pruebas que los médicos solicitan más frecuentemente para evaluar tu estado de salud antes de la implantación del cigoto incluye:
- un examen dental;
- examen de la glándula tiroides
- examen de los senos, especialmente si tienes más de 35 años
- examen de los tegumentos;
- pruebas de sangre: glicemia, grupo sanguíneo y Rh, VHC, HBS, hemograma, creatinina sanguínea, plaquetas y sideremia, Ag HBS, Chlamydia, Herpes simple, Listeria monocytogenes, RBW (VDRL), rubeola, estreptococo grupo B, prueba de HIV y prueba de trombofilia, toxoplasma, urea sanguínea;
- examen de la secreción vaginal y examen de orina, más urocultivo;
- cultivos del cuello uterino y prueba de Papanicolau.